jueves, 24 de mayo de 2012

Una persona que quiere venganza mantiene sus heridas abiertas

(OjO Si no sabes quién ha cogido un hacha, no sigas leyendo.
SPOILERS DE 1.22 DE REVENGE)


Cuando se habla de culebrones, la mayoría suelen apostillar cosas del estilo de que son repetitivos, chabacanos, "matan las neuronas", "es el cotilleo hecho serie". Pero lo cierto es que Revenge ha conseguido elevarlo (al igual que hizo The Good Wife con las series de abogados), quitandole toda el desprestigio que esa palabra suele llevar. Pero, aunque con mayor calidad, Revenge sigue siendo un culebrón con todos sus ingredientes: una víctima de algún asunto turbio, una dualidad amorosa, buenos y malos, aliados, tramas con alianzas, venganzas, chismes, desprestigio, giros rocambolescos...

Su principal pilar es esa víctima que decide vengarse, aka Emanda como me gusta llamarla. Emanda tenía un plan concreto: devolver a su padre su reputación y cargarse ya de paso a todos aquellos que hicieron crearle el descrédito de ser terrorista y de asesinarle. Durante la primera etapa, ése fue su cometido: manipular, poner en evidencia, incendiar casas... Pero su plan, en ningún momento, conllevaba ser una asesina. Ella no lo es porque su padre no la educó en eso, sino en el perdón. Esa decisión con cierta moralina detrás no romperá su plan de venganza, aunque otras sí lo hagan.

Pero toda heroína de culebrón se tiene que debatir entre dos amores para al final, despejar todas las dudas existentes. Si hay alguien que consigue derretir el frío corazón de Emanda fue, es y ¿será? Jack. Estaba claro que Daniel era sólo un peón mas en el juego y que como cualquier cuento de hadas, el amor para siempre era el único y absoluto. Pero, el culebrón da un giro. Ese amor para siempre encontró una piedra en su camino hacia el "y comieron perdices" y esa piedra, como era obvio, era la falsa Amanda, de cuyo nombre real ya nadie recuerda. Pero la piedra escondía un hierbajo: Amanda está esperando un hijo (cuyo padre no será Jack, claro). Un giro muy propio de todo culebrón que se aprecie, pero muy efectista. Consigue romper el corazón de Emanda (y es la primera vez que se la ve realmente vulnerable) lo que seguro traerá consecuencias.

Al igual que la gran sorpresa del final. Si antes hablábamos de que toda culebrón tiene que tener su apartado amoroso, también tiene que tener familiares fantasmas que en algún momento puedan resultar útiles para la trama. Durante 22 capítulos, prácticamente nunca se había mencionado a la madre de Emanda, lo cual era altamente sospechoso. ¿Había muerto en el parto? ¿Cuándo tenía dos, tres, cuatro años? ¿Estaba viva? Así, cuando el de pelo blanco le dice a Emanda: "esto lo has tenido que sacar de tu madre" era un claro mensaje de que la trama de la madre estaba más cerca que nunca. Y tan cerca, porque el colofón es que la madre está viva, aunque no se sabe en qué bando.

Toda protagonista tiene que tener su oponente, con características muy definidas: arrogancia, soberbia, altivez y que hace y deshace a su antojo. Ella, Queen V o Victoria Grayson, ha sido esa perfecta oponente. Durante muchos capítulos, su misión era mantener la compostura de esa decisión que tomó en su día de traicionar a su gran amor, luego intentó arreglar tal decisión, no tanto con la finalidad de honrar a David, sino por vengarse de Conrad. Una vez tomada y cuando parecía que ese plan de Emanda se iba a realizar, siguiente giro en el capítulo final plasmado en el accidente de avión en el que iban Victoria, Lydia y el agente junto con las pruebas. Sin embargo, esa mirada de Victoria en las escaleras del avión advierte que todo será una estrategia (porque nos negamos que no continué este personaje). 

Finalmente, hay que mencionar al gran Nolan, ya que sin él, el plan de Emanda no hubiese salido tan bien. Tras el final del penúltimo capítulo, muchos nos negamos a que desapareciese el espadachín de Emanda, aquel que tanto la protegía como le ensañaba lecciones de su padre. Con sus dotes tecnológicas, el aliado fiel ha ayudado mucho no sólo a ejecutar el plan, sino también a hacer crecer a Emanda.

Si el culebrón suele alargar un único drama, Revenge lo ha conseguido hacerlo bastante bien, aunque eso conllevase un arco de episodios, los relacionados con el juicio, algo más tediosos y aburridos. Tuvo una primera parte espléndida, centrada en la pura destrucción del renombre de unos cuantos con ese rotulador rojo del que nos hicimos tan fans. Tras ese arco in my opinon de relleno, volvieron los últimos cuatro capítulos a centrarse en la verdadera esencia de la serie para en los últimos cinco minutos, con Seven Devils de Florence & The Machine, dejarnos con los giros que demuestran que estamos ante un excelente culebrón y que las personas que quieren venganza mantienen sus heridas abiertas. Heridas y venganzas que tendremos que esperan hasta septiembre para ver el alcance de las mismas. ¡Qué espera más dura!

PD1. Obvio que todo el tema de Charlotte y Declan es cero interesante.
PD2. Obvio también que Ashley está más cerce en su plan de conseguir ser "alguien importante" y qué mejor que una Grayson para eso.


2 comentarios:

bvalvarez dijo...

Me encanta lo del "espadachín" :P

Efectivamente, el arco del juicio fue de relleno total. Para lo único que sirvió fue para convertir a Daniel en un miniGrayson con lo mejor-peor de los dos padres.

Supongo que tuvo que ver el hecho de verse con la renovación en el bolsillo. Estirar la trama, y más en los culebrones, nunca viene mal

Ardo en deseos de ver quién será la elegida para interpretar a la madre de Emanda!

Saludines!

Un telespectador más dijo...

Me ha encantado la temporada, una de las grandes revelaciones que me ha hecho disfrutar como pocas.

A saber qué habrá hecho Victoria, porque está claro que la reina no puede morir tan pronto, que ella es muy grande.

Saludos!